"Blake se dio cuenta de que había ido acercándose y de que observaba el muro y su verja herrumbrosa con idea de entrar. En efecto, de aquel edificio parecía desprenderse un influjo terrible al que no había forma de resistir. La cancela estaba cerrada, pero en la parte norte de la verja faltaban algunos barrotes. Subió los escalones y avanzó por el estrecho reborde exterior hasta llegar al boquete. Si era verdad que la gente miraba con tanta aversión el lugar, no tropezaría con dificultades."
H.P.LOVECRAFT: El morador de las tinieblas.
2 comentarios:
Son geniales. Me impacta, mucho, la primera, ese cristal empañado es magnífico. Las casas abandonadas son mi punto débil, afición de la infancia.
Afición de la infancia, también en mi caso, pero entonces sin cámara de fotos. Gracias, Amparo.
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